Con la llegada del buen tiempo, llegan también nuevas frutas a nuestros hogares. Una de las más esperadas es el melón. España es el país europeo que encabeza la lista de producción de melones, seguido por Holanda y Francia.
Esta fruta tan dulce y refrescante, contiene muy pocas calorías, aproximadamente 340 por kilo, y a la vez cuantiosas sales minerales (potasio, magnesio, calcio y hierro). Su composición es sencilla y muy saludable: el 90% es agua, carbohidratos y un poco de fibra.
Son muchas las propiedades que nos ofrece, y nos gustaría mostrároslas en este artículo:
- Son grandes aliados en dietas para adelgazar. Gracias al alto contenido en agua que posee y su bajo aporte calórico, es un alimento perfecto para seguir una dieta de adelgazamiento.
- Es una fuente de colágeno que ayuda a regenerar la piel y sus tejidos.
- Por su alto contenido en potasio es perfecto para el sistema nervioso y muscular.
- Favorece la formación de glóbulos rojos.
- Gracias a la presencia de carotenoides como el beta-caroteno, ayuda a mejorar la visión.
- Reduce la tensión arterial.
- Es diurético y laxante.
- Ayuda a prevenir el envejecimiento.
- Facilita la formación de anticuerpos, por lo que refuerza el sistema inmunológico.
- Debido al alto contenido en vitamina C, mejora los dientes y los huesos.
¿Sabíais que existen más de 850 variedades de melones?
Existen muchas variedades de melones, y podemos agruparlas por el color de la corteza, la pulpa, forma… La agrupación más común, es la que se realiza según el aspecto de la corteza. Veamos a continuación cuáles son los más comunes:
Tipos de melón verde español:
Son los que tienen una piel de color verde, y es la más típica que podemos encontrar en los lineales de nuestros supermercados. Dentro de este tipo, encontramos diferentes variedades.
- Melón Piel de Sapo:
El más común de todos, con forma ovalada y alargada, suele consumirse en los meses de verano. Su corteza de distingue por ser dura y gruesa, de color verde con rayas verdes. Dependiendo del grado de madurez, la tonalidad de las rayas variará. Su pulpa por el contrario es de un verde pálido, prácticamente amarillo, y de un sabor dulce.
Melones amarillos:
Se caracterizan por su piel color amarilla, y habitualmente, el color de su pulpa es blanca o verde claro. El sabor en este caso es ligeramente más picante que el de un melón dulce como los verdes.
Melón Cantaloupe:
Se caracteriza por su firma de malla, gruesa y de tonos verdes y marrones. De aspecto redondeado y con la pulpa de color anaranjado, muy aromático y de sabor dulce. El nombre se lo debe a una zona italiana, Cantalupo, donde se cultivó por primera vez esta variedad de melón. Gracias a este melón podemos preparar unos postres, batidos o smoothies deliciosos.
Melón Galia:
Esta variedad es un híbrido entre el melón de carne verde Ha-Ogen y el de corteza neta Krimka. De forma redondeada y piel similar a la del Cantaloup, con forma de malla áspera que se coge un color amarillo cuando alcanza su punto de madurez.
¿Cómo saber qué melón elegir?
Ya hemos leído muchas cosas sobre los melones, pero nos faltaría comentar algo tan importante como en qué debo fijarme a la hora de elegir un melón u otro. Sabemos que no es fácil, y que sólo los verdaderos expertos siempre aciertan, no obstante, queremos daros algunos consejos para que os sea más fácil la selección:
- Apretar con las manos por ambos extremos. Lo ideal es tener la sensación de estar ni muy duro ni muy blando. Si está tan blando que se hunden los dedos, indica que se ha pasado de maduración. Si por el contrario está muy duro, todavía no ha alcanzado el punto óptimo.
- Golpearlo ligeramente. Si el sonido es duro y pesado, todavía está verde. Si por el contrario es hueco y vibra, está en el momento perfecto.
- Es importante oler el melón (aunque pueda resultar extraño). Si en el extremo notamos un olor dulce y afrutado, es porque podemos consumirlo. Si no distinguimos ningún olor, es porque todavía no está maduro.
Esperamos haberos ayudado a conocer algo más sobre los melones. En Iberiana estamos muy orgullosos de poder ofrecer diferentes variedades de esta fruta a nuestros proveedores. Además, algunas de estas variedades, gracias a los diferentes países donde se encuentran los agricultores con los que trabajamos, podemos ofrecerlas durante todo el año.