Se aproxima el fin de las vacaciones, una época en la que disfrutamos de buenos momentos entre amigos y nos permitimos ciertos “excesos” con las comidas. Es normal que, aunque sigamos consumiendo productos que se encuentran dentro de la dieta mediterránea, nos permitamos ciertas licencias en las reuniones con amigos y nuestro cuerpo sufra cambios.
Además, durante las vacaciones hay un cambio de hábitos en lo que al ejercicio se refiere.
La llegada de septiembre suele indicarnos la vuelta a la rutina y el momento en el que todos decidimos que ha llegado la hora de poner fin a los pequeños excesos del verano y volver a nuestros hábitos. Por otro lado, es normal que la vuelta a nuestra actividad diaria nos haga sentirnos un poco más cansados en las primeras semanas.
Por todo esto, hoy queremos daros algunos consejos para retomar cuanto antes unos hábitos saludables y ayudar a que nuestro cuerpo se ponga en funcionamiento lo antes posible.
- Introducir cinco piezas de fruta y verdura al día: Tal y como recomienda la Organización Mundial de la Salud, es la base para llevar una alimentación saludable. Ayudarán a que nuestro cuerpo recupere la cantidad de vitaminas y minerales que necesita. Además, os recordamos que son ricas en fibra, antioxidantes, ayudan a mantener el cuerpo hidratado, y tienen ausencia de colesterol.
- Incorporar a la dieta diaria alimentos que ayuden al organismo a depurarse y eliminar toxinas: vegetales de hoja verde, frutas cítricas o frutas rojas. Un buen ejemplo para seguir este consejo es cocinar una ensalada de hoja verde con un toque de naranja.
- Hacer caldos depurativos: por ejemplo, de puerros o combinando varias verduras como acelgas, nabo, zanahoria y apio. Si todavía no os veis con ganas de tomar un caldo caliente, podéis animaros con caldos fríos, como, por ejemplo, el caldo de alcachofas con cebolla, espárragos verdes, hinojo, jengibre, menta y apio.
- Aumentar el consumo de verduras que ayuden al hígado a recuperar su pleno funcionamiento: endivias, cardo, alcachofas, escarola o berenjena ayudarán a este cometido. Después de un período de excesos en la comida, el hígado es uno de los órganos que más sufre, por lo que debemos ingerir alimentos que le ayuden a estar en máximo rendimiento para poder cumplir con sus funciones.
- Apostar por algún smothie de vegetales de hoja verde como el kale o las espinacas y combinarlos con apio y zumo de limón. Podéis incorporar a vuestro día a día este hábito saludable por ejemplo para hacer un tentempié a media mañana o a media tarde.
- En cuanto a la fruta, mejor tomar la pieza entera porque el zumo elimina prácticamente toda la fibra. Aunque lo importante es la ingesta de fruta, para estos momentos de intentar retomar nuestros hábitos tras el paso del verano, si que es más recomendable que la fruta sea entera. Por supuesto, el zumo es válido, aunque debemos saber que no contiene la misma cantidad de fibra.
- Aumentar el consumo de frutas como la piña, el kiwi o las manzanas, gracias al alto contenido en agua que tienen y a su componente detox, se convierten en las grandes aliadas para volver a recuperar la figura que teníamos antes de verano.
Por supuesto, estos son sólo algunos consejos que os animamos a seguir. Lo importante, como os hemos trasladado en alguna otra ocasión, es seguir una correcta dieta mediterránea durante todo el año junto con ejercicio diario.
Dieta mediterránea
Hasta ahora, en este artículo, os hemos dado consejos que podéis seguir para ayudar a vuestro cuerpo a volver a las condiciones en las que se encontraba antes de vacaciones, después de una época de excesos con la comida.
Pero también queremos recordaros por qué la dieta mediterránea es la idónea para seguir durante todo el año:
- Su base radica en productos como frutas y verduras, aceite, cereales, carne y pescado. Incorporar todos estos alimentos en nuestro día a día, dan como resultado una dieta equilibrada y totalmente saludable para nuestro organismo.
- Con el consumo de estos alimentos obtenemos una mejor condición física, y además ayudamos a prevenir enfermedades, principalmente cardiovasculares.
- También se asocia a ventajas como: prevenir el envejecimiento prematuro y la aparición de distintos tipos de cáncer.
- Se reduce el índice de obesidad, equilibra nuestros niveles de azúcar, colesterol y triglicéridos en la sangre.
Esperamos haberos ayudado con nuestros consejos. En Iberiana ya estamos preparados para retomar con ilusión la vuelta de las vacaciones y seguir contándoos cosas interesantes sobre nuestro sector y todo lo relacionado con él.